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La ciberdelincuencia va en aumento, pero ni siquiera el mejor software antivirus puede frustrar los avances de los estafadores que atacan la psique humana.
Algunas de las estafas más dañinas y costosas implican lo que se conoce como “ingeniería social”. Eso sucede cuando los estafadores utilizan técnicas de engaño y manipulación emocional de eficacia probada, gracias a las cuales engañan a la gente para que divulgue información personal o financiera, o incluso para que permita el acceso remoto a sus computadoras.
Eso fue lo que le pasó a Barry Heitin, un abogado jubilado de 76 años que perdió casi 740.000 dólares a manos de sofisticados estafadores que se hicieron pasar por funcionarios bancarios y gubernamentales.
Personas de todas las edades y niveles socioeconómicos son objetivos potenciales, pero los estadounidenses de más edad son especialmente vulnerables. Es más probable que tengan ahorros y se les considera más aislados o quizás con menos conocimientos informáticos.
Además, ahora hay más oportunidades para los estafadores con los mensajes de texto, las redes sociales, los sitios de citas o los grupos en línea. ¿Esa estúpida prueba de personalidad que acabas de hacer en Facebook? Es posible que haya sido creada por estafadores para conseguir tus datos personales.
“Lo que está cambiando es la capacidad de los delincuentes para contactarnos, y eso se debe al dispositivo que usamos las 24 horas al día, 7 días a la semana”, afirmó Amy Nofziger, directora de apoyo a las víctimas de fraude de AARP Fraud Watch Network. “No pasa un día sin que tengamos una pérdida millonaria”.
Nunca nadie quiere ser la víctima, pero los delincuentes perfeccionan constantemente sus técnicas y actúan a partir de rutinas que ya han sido probadas.
A continuación, ofrecemos una serie de consejos para evitar algunos de los fraudes más devastadores y recomendamos qué hacer si tú, o un ser querido, cae en la trampa.
Evitar los fraudes
Familiarízate. Las personas pueden ser susceptibles de sufrir estafas debido a su etapa vital o sus circunstancias. Los jóvenes recién graduados de la universidad pueden verse atraídos por prometedoras ofertas de trabajo. Las personas que quieren comprar una casa son engañadas para que les transfieran dinero a los estafadores. Las personas mayores tienden a caer en estafas en las que los delincuentes se hacen pasar por funcionarios del gobierno o por alguien que ofrece soporte técnico. Y personas de todas las edades caen en estafas que prometen inversiones con rendimientos lucrativos, a menudo en criptomonedas.
Para mantenerte informado, familiarízate con las estafas más comunes que circulan. La Comisión Federal de Comercio les envía alertas a los consumidores, y el FBI, que publica anuncios de servicio público sobre las estafas más recientes, pronto ofrecerá una opción para suscribirse a actualizaciones por correo electrónico.
Atento a tus emociones. Los delincuentes incitan a nuestro cerebro y, a menudo, combinan esos incentivos emocionales con una falsa sensación de urgencia.
“Soy una persona sofisticada y consciente de estas estafas, pero cuando oí las palabras: ‘Vamos a matar a tu hija’, casi se me fue todo el sentido común por la ventana”, relató la reverenda Debra Andrew Maconaughey, rectora de la iglesia episcopal de St. Columba en Marathon, Florida, que el mes pasado fue el blanco de delincuentes que le exigieron dinero.
Entiende lo que no te pedirán. Nofziger recibe quejas a diario. “Escucha lo que te piden”, es su consejo. “Si alguien te pide tarjetas de regalo prepago, bitcoin a través de cajeros automáticos, lingotes de oro, dinero en efectivo, Venmo, CashApp, Zelle, números de Seguridad Social o información de Medicare, detente”, aconsejó.
El gobierno y la policía rara vez se ponen en contacto con los ciudadanos por teléfono y, aunque lo hicieran, no te pedirán que les pagues con criptomonedas, tarjetas de prepago y transferencias bancarias.
Recuerda la precaución en línea. Hay algunas prácticas básicas que pueden ayudar, pero también puede ser útil reducir la velocidad y actuar de manera más deliberada, como dedicar tiempo a comprobar si los correos electrónicos sospechosos tienen direcciones que parezcan oficiales (o son diferentes por una letra o un dígito).
No descargues programas que proporcionen acceso remoto a tu computadora o teléfono móvil. No hagas clic en enlaces patrocinados, anuncios ni pantallas emergentes, porque pueden contener programas maliciosos. Activa los bloqueadores de ventanas emergentes en tus navegadores.
Los estafadores pueden falsificar números legítimos en su identificador de llamadas para que parezca que llaman, por ejemplo, de tu banco o de la Administración de la Seguridad Social. Asegúrate de devolverles la llamada a los proveedores utilizando números de teléfono que hayas encontrado por tu cuenta o en el reverso de tus tarjetas bancarias. (Ten en cuenta también que se sabe que los estafadores se apoderan de teléfonos móviles y redirigen las llamadas salientes).
¿Qué podemos hacer en caso de haber sido estafados?
¿Cuál es el primer paso?
La naturaleza de cada estafa es diferente, por lo que variarán las soluciones. Pero, en general, la primera llamada debería ser a tu entidad financiera para alertarla. Si le transferiste dinero a un estafador, puedes tratar de solicitar una devolución o una anulación, pero eso debe hacerse casi de inmediato.
Si compraste una tarjeta de regalo, infórmalo de inmediato al emisor de la tarjeta.
¿Qué agencias de la ley te pueden ayudar?
Muchas personas no denuncian los fraudes porque sienten mucha vergüenza, pero es importante hacerlo de manera rápida y con la mayor cantidad de información posible. Eso ayuda a que las fuerzas de seguridad agrupen las denuncias, detecten pautas y amenazas emergentes para poder identificar e investigar a los delincuentes.
La policía local. Los expertos sugieren empezar por el departamento de policía local, aunque no todos tendrán experiencia o formación en ciberdelincuencia. Si el tuyo no la tiene, pregunta por un detective especializado en delitos económicos. Pero algunas localidades, como San Diego y Santa Clara, California, han creado grupos de trabajo específicos para investigar las estafas en línea o la explotación de ancianos.
Contacta al FBI. Todas las víctimas de ciberdelincuencia deben presentar sus denuncias en el Centro de Denuncias de Delitos en Internet, o IC3, que es un organismo gubernamental.
Servicio Secreto. Es posible que el Servicio Secreto no sea la primera agencia en la que pienses si sufres una estafa, pero su sección de investigación cibernética puede serte de ayuda, sobre todo si has transferido dinero. Puedes denunciar los delitos en tu oficina local.
Pero debes hacerlo casi de inmediato si quieres tener alguna posibilidad de recuperar los fondos. Jason Kane, agente especial a cargo de la oficina de la agencia en Nashville, Tennessee, dijo que, si una persona le transfiere dinero a un estafador y se pone en contacto con el Servicio Secreto menos de 48 horas después, los agentes pueden ayudar.
“Cuanto antes llames, mayores serán nuestras posibilidades de recuperar los fondos, pero, si han pasado las 72 horas, la probabilidad de que se devuelvan los fondos es significativamente menor”, señaló Kane.
La Comisión Federal de Comercio también recibe quejas.
¿Quién puede ayudarme en este proceso?
La National Elder Fraud Hotline, gestionada por el Departamento de Justicia, puede ayudar. La AARP Fraud Watch Network (disponible los días laborables en el 877-908-3360) también puede proporcionar más orientación.
¿Qué posibilidades hay de que me devuelvan el dinero?
A veces es posible, pero no suele ser probable. Depende de la estafa y de la rapidez con que se denuncie a la entidad financiera y a los organismos competentes.
¿Qué debo hacer si creo mi computadora puede haber sido afectada?
Si crees que un estafador tuvo acceso a tu dispositivo, haz que un profesional limpie tu máquina, como el servicio Geek Squad de BestBuy (pero ten cuidado con las estafas relacionadas), el Genius Bar de Apple o un técnico informático local.
Esto significa formatear la computadora a la configuración de fábrica y reinstalar el sistema operativo. Tomar esta medida elimina cualquier malware que no puedas ver, incluidos los troyanos de acceso remoto, que permiten que los atacantes controlen tu dispositivo, afirmó Sinan Eren, experto en ciberseguridad y director ejecutivo de Opnova, una empresa emergente que automatiza la seguridad.
“Este es el enfoque correcto para eliminar cualquier duda”, aseguró Eren.
Si mi computadora empieza a emitir alarmas, ¿qué debo hacer?
Varias víctimas parecen haber hecho clic en una ventana emergente, anuncio o algún otro enlace que hizo que sus computadoras emitieran fuertes ruidos, como si estuvieran siendo atacadas. No sigas las instrucciones desplegadas en la pantalla. Más bien, apaga la computadora y desconéctala de internet. A continuación, asegúrate de que está libre de intrusos.
¿Qué debo hacer si sospecho que mi teléfono está en peligro?
Los estafadores pueden infiltrarse en tu dispositivo móvil de diferentes maneras, como desviando llamadas y mensajes a otro número o transfiriendo tu número de teléfono a un dispositivo que ellos controlen (lo que se conoce como intercambio de SIM).
Si crees que tu teléfono ha sido manipulado, visita la tienda de tu operador de telefonía móvil o llama al proveedor desde otro número de teléfono.
Explícales tus sospechas y repasa con ellos la configuración de tu cuenta, incluido el desvío de llamadas y la contraseña del buzón de voz, explicó Eren. “Es una buena idea establecer un PIN de seguridad con tu operador de telefonía móvil, que se te pedirá cuando llames para solicitar servicio a partir de ese momento”, dijo.
Eren también sugiere devolver el dispositivo a su configuración de fábrica, recuperar los datos a través de iCloud o Google Play y actualizar siempre el sistema operativo en cuanto haya una actualización disponible.
¿Algo más?
Siempre es buena idea obtener una copia gratuita de cada uno de tus informes de crédito de las tres agencias de crédito —Equifax, Experian y TransUnion— para ver si algún estafador ha abierto una cuenta a tu nombre. A continuación, congela tus archivos de crédito, lo que restringe el acceso a tus informes de crédito y hace más difícil que los estafadores abran nuevas líneas de crédito a tu nombre.
Cambia las contraseñas del correo electrónico, las entidades financieras, las computadoras y dispositivos móviles, y cualquier otra cuenta importante. Utiliza siempre la autenticación de dos factores, si aún no lo haces.